Aquel lugar

Cuando llegué a ese paraíso casi pintado no me di cuenta hacia que lado corría el viento. Transformado en un pez, nadé por donde arrojaban pedacitos de pan, ahí justo donde el hada no era madrina, sino ahijada. La mentira disfrutaba tirada al sol, al tiempo que la ignorancia armaba dos daikiris. Todo era tan ficticio que el mas alto de los árboles salía por el agujero de ozono. Dos duendes aprendían a remontar un barrilete hecho por ellos mismos. La gente era inmensa, gorda y mal hablada. No había tiempo en ese lugar soñado, siempre eran las tres menos cuarto de la tarde. La hora exacta en que Febo cruza el límite entre el comienzo y el final de la tarde. Tarde muchísimo tiempo en la fila del baño químico, pero no me importaba, no me dolían las piernas. La gente caminaba, charlaba y alimentaba a los animales. Todo era tan perfecto que no podía ser real. Y pensar que cuarenta minutos mas tarde ningún kiosquiero me cambió monedas para el colectivo.

Los ambientes

Los humanos somos tan solo parte de un ambiente. Los ambientes hacen lo que quieren con nosotros. El micro centro saca lo peor de nosotros, un casamiento nos transforma a todos en actores de Hollywood y Pinamar en Enero en jugadores de rugby. Nadie es igual en todos los ambientes. En el trabajo, en nuestra casa y en la casa de nuestro mejor amigo (cuando él no esta, pero su mujer si). El aire de mar ayuda a los enfermos y a los lobos marinos. Mucha gente habla sobre el medio ambiente, sin dejar de lado el otro medio a la hora de pensar los discursos. Hay ambientes hipócritas, ambientes sinceros y ambientes compartidos a precios altísimos. Algunos pueden dejarse influir mas por algunos ambientes que otros. Hay diputados que se sensibilizan en el cine pero, sin duda el aire del Congreso no les genera lágrima alguna. Todos son serios en una marcha militar y nadie lo es una marchanta. ¿Acaso esta mal llorar en clase de matemáticas? Nadie ríe en un cementerio, nadie se atreve a gritar: ¡Vos sos vigilante, te vamos a correr por todas partes!, en un recital de Pimpinela. Por mas que tratemos nunca le vamos a ganar definitivamente a los ambientes. Los únicos que lo logran son apodados "locos" y los mandamos a un Mani comió, donde ni siquiera les damos maní para que coman. Si somos buenos seamoslo en todos lados por igual, no solo cuando nos conviene. Si somos malos, seamoslo lo menos posible. Los ambientes nos persiguen, nos devoran y nos escupen transformados. Luchemos porque el ambiente sea lo mejor posible para todos. Yo prometo no tirar mas cohetes en el subte demorado de todos los días.

El arte de crear

Imaginar algo es la expresión de libertad de un ser humano. Crear, encerar y pulir. Hacer un garabato en la puerta de un baño público o transformar una media en un pasamontañas son muestras de creatividad. El acto de crear algo es inmenso. Escribir una canción, diseñar un logo e inventar una guerra. Todo lo malo y lo bueno fue alguna vez creado. Alguien creó un idioma, otro alguien inventó la rueda y algún pescado inventó ser pescado. También todos nos inventamos a nosotros mismos, usamos la materia prima a nuestro gusto, aunque a veces la materia sea prima lejana. Yo no sé donde se ubica la creatividad en nuestro cerebro, ni porqué cada persona tiene fácilidad para crear diferentes cosas. No hay nadie que sepa todo, pero todo es sabido, por distintos alguienes. Alguien sabe de mécanica, alguien sabe de gramática y alguien save the wales.

La venganza del planeta llamado tierra

No sólo Chiche Hell Doom tiene memoria. La tierra, lugar donde estamos parados, también. Y no creo que sus recuerdos sobre los humanos sean de lo mas alentadores (para nosotros, los fulanos en el camino). La tierra nos debe odiar. ¿Qué le hicimos de bueno? Nada. Le hacemos tragar nuestra basura, los volamos montañas y le sacamos su bijoutire de las minas. Nunca enterramos a nadie vivo, no señor. Siempre le damos los muertos. No entiendo cual es la razón por la cual alguien puede declarar un sector como Patrimonio Nacional de la Humanidad. ¿Acaso el resto de la tierra no lo es? La tierra es todos y de nadie. Hay que protegerla toda, no solo sus partes íntimas. ¿Cómo es posible que la gente se pelee por un pedazo de tierra?, es una locura. No hay papel que legitime la propiedad de algo que es de todos. Todos deberíamos tener un pedazo de tierra por igual. Así cada cual utilizaría su pedazo de una manera muy cuidadosa, y por defecto la tierra estaría mejor. A nadie le va a gustar vivir en un basural, entonces todos reciclarían cuidadosamente sus residuos. Todo sería lindo. Yo no tiro basura en tu calle y vos no me quemas el bosque. Pero esta tierra no debe ser hereditaria, porque cada persona que nace ya tiene un terreno designado. Empecemos cuidando cada uno lo de todos. La Pachamama esta muy enojada. Ella nos dice que esta enojada con tzunamis, terremotos y parabrisas (rotos por el granizo). Y tiene razón, si la tratamos muy mal. Si la queremos ella nos va a querer. Sueño con ir a la Bristol en Enero y que los pañales usados no me golpeen cuando surfeo.